Se que estas ahí, con tus ojos callados,
y que me lees y relees,
dejando que los momentos se pinten,
de la sangre que derramo por ti...
me nace de dentro, como una fuente,
el deseo...
...de que alguna vez soñaras lo que sueño,
por soñarte al fin sólo,
como deseas que te sueñe...
No existe el mundo,
apenas un viaje
que vivimos despiertos,
ni el fantasma de la felicidad
que a veces duele,
cuando su sonrisa es tétrica
como el olvido...
Amo lo que tu amas,
porque estamos vivos,
y nos duelen en el alma,
las piedras que tira la ignorancia...
Somos los grandes ignorados
siempre insaciables,
en nuestra ración de recuerdos,
seguimos apiñándolos como piedras,
y se nos caen con el tiempo...
...hasta recordar que estamos muertos.
Menos mal que Tu aún vives...
Menos mal que Tu aún lees...
Menos mal que Tu, aún... sueñas??
dejando que los momentos se pinten,
de la sangre que derramo por ti...
me nace de dentro, como una fuente,
el deseo...
...de que alguna vez soñaras lo que sueño,
por soñarte al fin sólo,
como deseas que te sueñe...
No existe el mundo,
apenas un viaje
que vivimos despiertos,
ni el fantasma de la felicidad
que a veces duele,
cuando su sonrisa es tétrica
como el olvido...
Amo lo que tu amas,
porque estamos vivos,
y nos duelen en el alma,
las piedras que tira la ignorancia...
Somos los grandes ignorados
siempre insaciables,
en nuestra ración de recuerdos,
seguimos apiñándolos como piedras,
y se nos caen con el tiempo...
...hasta recordar que estamos muertos.
Menos mal que Tu aún vives...
Menos mal que Tu aún lees...
Menos mal que Tu, aún... sueñas??
Seguramente por eso escribes desde tan hondo:
ResponderEliminarSabes que te leen y por eso te vuelcas al decirte.
Un abrazo desde la vida profunda que surge de los sueños.
Oléeeeee
ResponderEliminarTu
ResponderEliminardos letras
una palabra
todo un mundo.
Yo sueño, siempre sueño...
Muy bonito el poema.
Un abrazo.
Sueño, vida, verdad, muerte, mentira... y las piedras que inertes esperan siempre a los pies del camino sin portar la dirección que tomes.
ResponderEliminarSolo me importa lo que te importe: la palabra, el verso...