...Hoy la noche sueña como tu,
cambiando tiempos y esperanzas...
hablando un idioma incomprensible,
de murmullos, y silencios,
sin una boca, ni un tiento...
es negra como tu pelo,
hasta tiene el cabello ensortijado,
oliendo a caracolas como el tuyo...
Hoy la noche es mi insomnio,
y tus pestañas,
mariposas durmientes,
que guardan la belleza,
de tu mirada...
Me acaricia la noche
como me acaricias tu,
con tu respirar en calma,
Amo tu sueño,
porque dormida,
eres tan mía y no lo eres,
que deseo que el halo que te envuelve,
se convierta en mi piel intangible,
por rozarte sin que despiertes...
cambiando tiempos y esperanzas...
hablando un idioma incomprensible,
de murmullos, y silencios,
sin una boca, ni un tiento...
es negra como tu pelo,
hasta tiene el cabello ensortijado,
oliendo a caracolas como el tuyo...
Hoy la noche es mi insomnio,
y tus pestañas,
mariposas durmientes,
que guardan la belleza,
de tu mirada...
Me acaricia la noche
como me acaricias tu,
con tu respirar en calma,
Amo tu sueño,
porque dormida,
eres tan mía y no lo eres,
que deseo que el halo que te envuelve,
se convierta en mi piel intangible,
por rozarte sin que despiertes...
La noche y un cuerpo dormido que nos acompaña.
ResponderEliminarDeliciosa imagen para rozar sin despertarla.
Abrazos.
Precioso.
ResponderEliminarun saludo.
mariposas.. y caracolas..
ResponderEliminarme gustan las palabras con las que tejes tus versos..
me recuerdan a las mias, a mis alas, a mi orilla.. a my.
Es verdad, que razón llevas cuando dices que amas su sueño porque dormida es tuya y a la vez no lo es...
ResponderEliminarbesitos
¡Qué hermoso poema! Sensual, simple y bello como ese sentimiento que se cuela por tus palabras. Me ha encantado. Besos invernales.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho esa noche tuya, que llena de preciosas im�genes y sue�os el descanso de una mujer dormida.
ResponderEliminarUn saldudo.
siempre la noche y su vigia...
ResponderEliminar¿Qué diferencia hay entre la realidad y el sueño? Yo, quizá, me quedaría con el sueño porque la realidad es siempre más dura...
ResponderEliminarUn beso con cariño,
Ariola
Como ya te dije un día me encantan que tus personajes sueñen, duerman...
ResponderEliminarUn saludo.
Cris.-
Hay que soñar cuando sueña la noche.
ResponderEliminarClap Clap Clap
ResponderEliminarMe rindo ante el talento