...En tu día renací a golpe certero,
de manos del herrero, la herrumbre y mi camino,
de la tarde robé algo perdido,
quizás un sueño, quizás un niño...
...pensamiento pueril que se hizo hombre,
vino al alma y me robó el gesto sencillo,
y de la intensa luz que tu enarbolas,
enamorado quedó, del primer brillo,
Acaso en el camino que sorteo...
que veo cual seguir en este instante...
encuentre del planeta que deseo...
la calida tibiez del sol brillante..
de aquel que de calores quedé preso...
y me buscó en su fulgir cual astro errante...
porque tal día, en el gesto de mi amante...
amores libaré del primer beso...
y si acaso me tomaras por poseso,
de mi alma en estas lides, tan cambiante...
acuerdate quizás del primer beso,
y volvera a iluminarse con la tarde..
la mirada en tu semblante,con su peso...
Para mi el primer beso es el último y el último fué el primero. Es un sol que añoras cada noche, mañanas húmedas que esperas, mientras sueñas que el último fue el primero. Solo uno muchas veces. Como el sol que no vemos por la noche, pero que está en algún sitio, alumbrando a alguien mientras se escapa al refugio de mi mañana.
ResponderEliminarUn beso y chuff!!
Buenos dias Carlos :)
ResponderEliminarMe provocas una enorme ternura...me encantaria ver tu mar desde tus ojos..Y acariciar esa arena..
Buen domingo..besitos!
Eres guapisimo,y tierno,y tienes unos ojos que podrian atravesar cualquier cosa....
ResponderEliminarBesos celestes..
Vaya!, despertando de su siesta a las pasiones... tus versos vespertinos son distintos.(incluso milimétricos) Quizá halla un brillo infundado entre tanta estela, quizá, pero te veo muy seguro en su camino.
ResponderEliminarEl beso se gesticula entre tus letras, pero bebe de ellas el vacío.
En fín, te dejo mi comentario a tus palabras ámplias en mi blogs y me quedo servida, (que no satisfecha) con ello.
Sangre; de nuevo intencionado tu comentario, con o sin retroceso dá lo mismo. Ubicaté donde prefieras, no hay esgrima, pero si la hubiese, TOCADO, sería lo escogido. Pues no quise que mi lengua fuese tan acérrima como para hacer sentirte malherido.
Mi casa nunca ha sido túmulo mediocre de palabras y menos lugar inquisitivo, por ello te pido que no deshagas lo que pensaste o sentiste...por favor...déjalo escrito.
Mañana no importará de lo dicho nada, ni será herencia. Sirven las ultimas que se dicen con acierto o sin tino.
Deseando que tu lenguaje no halle depauperación con tanto esfuerzo.
Olimpia.
Sol buscando a la luna :D
ResponderEliminarCarliños, xa non sei que dicirche, :-) cada uno de tus poemas, (unos más que otros, si) confirman tu dulzura poética, tu fuerza arrolladora...
ResponderEliminarEste poema lleva una métrica precisa, exquisito sabiéndose parido desde las entrañas, asi... a bocanadas, porque así nos los haces sentir.
Me gusta leerte, ya sabes...
Un beso (buena semana).
Olimpia,como me doy por aludida por tu comentario..."Despertando de su siesta las pasiones.."
ResponderEliminarNo tengo nada que envidiarte chatina :-))))
Y aunque se que mis comentarios de hoy me traeran quebradero de cabeza,como siempre,digo lo que pienso,cuando lo pienso,y cuando quiero.
Hola Sangre,
ResponderEliminarLa verdad, alucino un poco.
Estaba haciendo tiempo, porque a este trasto que tengo por ordenador le cuesta bajarse video-canciones (o como se diga) del You tube, y no quiero irme sin oír lo que nos puso Mirada.
Mientras, y para distraernos de tantas cosas, te mando un link para que le eches un vistacillo :
http://www.rssailing.com/fleets.asp?fleet=RS700
Estoy negociando un RS700 con unos amigos... Te animarías a salir un día ??
Mejor piensa en eso un ratillo...
Un abrazo
Chuff
Buena persona Zenyzero.
ResponderEliminarExcelentes versos los tuyos sobre el sol invernal.
Gracias por tu visita y tus palabras.
Un fuerte abrazo.
Lindos versos.
ResponderEliminarEl origen de tus besos, el calor del astro rey, saber que todo lo que transmiten se esconde entre tus palabras...
Cuanta paz da leerte.
Gracias
re lindo tus versos un saludo y besos
ResponderEliminarMe gusta el sol de invierno, sí.
ResponderEliminarY me ha gustado el tuyo.
La tibia caricia del sol del invierno es el bálsamo perfecto para sobrevivir en épocas difíciles. Hermoso poema.
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